Lo primero que se me ocurre escribir es “estamos como cabras…”, así es la ruta de hoy es el medio natural de las cabras montesas…más de uno no se lo podía creer lo espectacular e inverosímil del recorrido por Los Alayos, ¡SI SEÑOR VAYA PEAZO DE RUTA!.
Antes de empezar a relatar la crónica quiero decirles a mis compañeros “bicicleteros” algún calificativo…
- Fernando, lo tuyo es “pa” quitarse el sombrero te atreves con todo que se te pone por delante, no te quejas y además eres un cachondo cabrero encima de la bici con tus ocurrencias.
- Pepe, eres un camicace bajando aunque un maestro te ha puesto en tu sitio…jejejeje. No digamos lo bien que subes, eres un máquina.
- Miguel Angel, si después de sólo 2 meses cogiendo la bici has conseguido superar ésta ruta no quiero pensar lo que puedes ser con el 4º Dan de Judo que tienes, enhorabuena campeón.
- Mingo, eres el cabrero “number one” has conseguido finalizar la ruta con tu peso de más de 100 Kgs…jejejeje. Puedes decir en voz alta que nadie a pedaleado con tu peso por esa zona, ¡ala tus coj….!.
- Dani, alias el cabra camaleónico no sé cuantas veces te has “mudao” de ropa en la ruta pero que después de ésta entras de lleno en el grupo bicicletero. Subes y bajas como el aire…claro que con la bici que llevas cualquier lo hace campeón.
- Javier, un día más nos ha demostrado como se sube por zonas casi imposibles sin bajarse de la bici, un día de éstos haría falta que “colgaras” la bici y descansaras coj….Por favor, no te rías más de nosotros…enhorabuena hermano.
- Isaías, el cabrero fotográfico de la ruta…voy a tener que comprarme un ladrillo de móvil “pa” que otros hagan el reportaje, ya está bien…ehhhh.
Iniciamos la ruta desde el Centro Comercial Alhsur de La Zubia para dirigirnos a Gójar, Camino de la Fábrica hasta las inmediaciones del Área de la Naturaleza de Dílar donde llegamos a buen ritmo para comenzar con una subida con un desnivel de 750 metros en apenas 6 Kms. hasta el Collado de Picacho Alto (1.680 metros).
Todos reagrupados empezamos la subida al ritmo de cada uno menos yo…verdad Mingo?. Llegamos a Ermita Vieja y hicimos un descanso merecido para coger fuerzas, nos quedaba que salvar un “paredón”.
Al llegar al camino de Prado Seco nos desviamos a la izquierda para coger un sendero que sus inicios es ciclable para llegar al pie del Picacho Alto donde todos tuvimos que hacer piernas en fila india y a ritmo de legionario, son unos 500 metros a pie para salvar unos 250 metros…alguno ni se enteró pero llegó el último.
Las vistas a lo largo del sendero son espectaculares, creo que en pocos sitios hay como éste, donde puedas divisar el horizonte desde éste único mirador de Los Alayos, 110% recomendable.
Una vez salvada la cota máxima viene lo mejor disfrutar de una vereda que transcurre en falso llano a pocos metros de las cumbres del Picacho Alto y Corazón de la Sandía, en algunos tramos piensas (ya no salgo más con la bici sin licencia federativa o sin seguro de vida…).
Tras disfrutar de éste tramo, la vereda empieza a descender a la altura del Barranco de Rambla Seca para coger un arenal que nos conducirá al Río Dílar. Con ganas de hincarle el diente a la rambla, más de uno ha estado a punto de quedarse sin dientes…jejeje, algunos os lo tenéis que tomar con más tranquilidad que la bici no es lo que más vale sino el piloto…
La bajada digna de conocer por el marco inigualable que se atraviesa y por el control que hay que tener para “conducir” la bici para que no te lleve donde ella quiere (Rambla al más puro Dakar).
Casi al finalizar la rambla nos encontramos a dos personas que nos advirtieron de que no podíamos pasar con las bicis por ésta zona…sólo digo que habrá que prohibir menos y permitir más la cultura a la Naturaleza.
Ya sólo nos quedaba cruzar el Río Dílar a través de un puente de madera para iniciar la vuelta a casa por el Camino de la Fábrica, hablando de la espectacular ruta que nos hemos “marcao” en el día de hoy.
¡Otra a la saca!
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